Freaks
and Geeks, 1999-2000
Como suele ocurrir con todo lo que acaba
antes de tiempo, Freaks and Geeks es considerada hoy como un icono del
imaginario adolescente, una serie de las llamadas de culto, tanto por la
escasez de ejemplos televisivos parecidos, como por su final repentino y prematuro.
Freaks and Geeks, 1999-2000. |
Esta idea de tanteo, de aventura y de
iniciación se refleja realmente bien en Freaks and Geeks por el hecho de dividir las
tramas entre aquello que sucede a los Geeks, un grupo de preadolescentes que
empiezan a descubrirlo todo con el asombro y la inocencia de la infancia pero
con el ansia y el cinismo de la adolescencia; frente a aquello que acontece a
los Freaks, más iniciados en las dinámicas adultas pero también, por ello, más
desencantados y temerosos ante el vacío de un futuro vago e incierto.
A través de una pareja de hermanos, los
Weir, Freaks and Geeks nos adentra en un instituto americano a principios de los 80 y,
con la división de edades y situaciones, nos permite ver claramente el tránsito
y el cambio abismal que se produce cuando pasas de los 13 o 14 años, a los 15 y
16.
The Geeks. |
The Freaks. |
The Freaks. |
The Geeks. |
Se ha hablado hasta la saciedad de la
impotencia y la frustración que supuso el hecho de que se cancelara la serie tan
pronto ya que, con unos cuantos capítulos más, hubiésemos podido darnos el
gusto de ver cómo lidian los distintos personajes con ciertas circunstancias
que en la primera temporada no se dan, simplemente, porque no era el momento
adecuado o porque, tal y como pasa en la vida, las cosas pasan muy rápido pero,
aunque parezca que esta frase no tiene sentido, a la vez también suceden muy
despacio.
Revisitando
Family Matters o Growing Pains
-¿Sabes quién hacía pellas en el instituto?
Jimmy Hendrix y, ahora, está muerto.
-¿Sabes quién tuvo sexo prematrimonial en
el instituto? ¿Y sabes qué hace ahora?
Nada, porque está muerta.
Nada, porque está muerta.
The parents. |
Una de las cosas que más me gusta de Freaks and Geeks es cómo lidia con el tema de la familia en un momento tan concreto y
particular como es la adolescencia. Muchas veces las series, libros, canciones
o películas adolescentes cuando abordan el tema de las relaciones entre padres
e hijos incurren en el tópico de la mutua incomprensión sin ahondar más en
ello, atribuyendo todo a un exceso de rebeldía por parte de los hijos (que
muchas veces parecen psicópatas más que adolescentes) o resolviéndolo con un
exceso injustificado y caricaturesco de brutalismo parental lo que, por regla
general y afortunadamente, no se corresponde con la realidad.
Cuando simplemente perteneces a una familia
normal, en la que quieres a tus padres y quieres seguir tu camino, pero a la
vez no quieres defraudarlos ni que decidan por ti porque ya eres mayor y el
mundo te pertenece, a veces es complicado encontrar ejemplos que ilustren sin
más este ten con ten que se da en cierto momento de la vida.
Si a eso sumamos las diferencias
generacionales y las hormonas, es difícil encontrar ejemplos que recojan esa
situación en la que entran en juego tantos matices.
En My so Called Life por ejemplo (serie sin la cual creo que no existiría Freaks and Geeks ya que hay escenas, tramas y hasta actitudes de ciertos personajes que son
calcadas) las relaciones parentales son mucho más tensas y, para mi gusto más
exageradas.
Daniel (James Franco) tonteando con el punk. |
En Freaks and Geeks, y a diferencia de tantas series
y sitcoms sobre la vida en familia como Growing Pains, Family Matters, El show
de Bill Cosby…, se percibe claramente, se naturaliza y se incide en situaciones
universales como por ejemplo son el bochorno que produce la primera vez en que
los hijos ven a sus padres como personas (y no como padres), la
culpabilidad de convertirte en alguien independiente y el miedo a hacer daño a
tus padres cuando perciban que ya no dependes de la misma manera de ellos, el
infantilismo y la sobreactuación sinsentido en la que se cae cuando tratas de
educar y proteger a alguien de todas las cosas que te dan miedo incluso cuando
son cosas por las que tu mismo has pasado (el padre de Lindsay y Sam sólo sabe
decirles cómo pueden morir si hacen cualquier cosa poco ortodoxa o recomendable
pero luego se pone como ejemplo al contar a Lindsay como perdió la virginidad
con una prostituta en la guerra de Vietnam), etc. etc.
Bad Reputation
Para no alargarme más, querría simplemente abordar la idea de Freaks and Geeks como filón para un repertorio de distintos prototipos y modelos de conducta adolescentes.
Para no alargarme más, querría simplemente abordar la idea de Freaks and Geeks como filón para un repertorio de distintos prototipos y modelos de conducta adolescentes.
No sólo por las distintas franjas de edad
de las que he hablado antes, sino por la variedad de personajes y de historias
que se tratan y se mezclan a lo largo de la serie, Freaks and Geeks es una fantástica taxonomía de problemas, emociones, comportamientos y realidades. La ventaja de
este repertorio es que no se encasilla a un personaje sin más. Ni Bill, ni Kim,
ni Nick, ni Neal, ni Daniel ni el resto de protagonistas son planos sino que,
no sé muy bien cómo, lo que van viviendo cada uno de ellos se acumula en su
interior y se refleja en sus acciones y en su comportamiento en las distintas
tramas.
Ver crecer a un personaje ficticio es un
privilegio y, por ello, el hecho de que la serie no continuara es un batacazo,
porque te quedas completamente a medias con todo.
Otra de las cosas que más me gusta en este
sentido es cómo piensas en un primer momento que Lindsay o los freaks van a ser
los que le aporten más peso a las tramas estereotípicamente adolescentes a la
serie para descubrir, poco a poco, que hay cosas mucho más importantes que se
cuecen donde están los Geeks y que, puestos a elegir un modelo de conducta,
quizás sea mejor ver bien la serie y pensárselo dos veces.
Bill como la mujer biónica. |
Lindsay y Nick. |
Lindsay y Kim. |
En definitiva, hay que ver Freaks and Geeks pero hay
que saber a qué atenerse. He de decir que a mi, la primera vez me
decepcionó profundamente. Me faltaba acción, me sigue pareciendo que hay muchos
tópicos sobre todo en lo que a la sexualidad adolescente respecta y me
frustraba cómo todo se quedaba en suspenso, ya que soy bastante impaciente con las series. Pero,
tras volver a verla varias veces y pensar mucho en ella y en mi propia
adolescencia, me he ido dando cuenta de que, al margen de que como serie muchas
tramas se hubieran solucionado y me hubieran satisfecho más con una segunda
temporada; tal y como es Freaks and Geeks, incompleta, insatisfecha e imperfecta, se
acerca mucho más a lo que es la vida y, sobre todo, la adolescencia.